Mis manos tiemblan al sostener la fotografía, como me pasó al tomarla debido a la emoción del momento. Desde el punto de vista técnico, no es una obra de arte, está un poco movida y con un poco más de zoom no habría quedado mal. Pero a mí me encanta. 
Miro mis ojos bien abiertos que miraban un poco a la derecha, temerosos de que no se realizara bien la foto. Grandes ojeras fruto de la semana de exámenes, trabajos y problemas personales habitan debajo de éstos. Pero esta vez, podría decir que si las veo es, sobre todo, porque soy yo y sé que las tenía. El Sol iluminaba esa fotografía y un coche negro se paraba detrás pareciendo casi hasta importante aunque en realidad, tan solo pasaba por allí.
Descanso un instante y bajo un poco la mirada. Ahí está la boca. Curvada hacia arriba y formando la verdadera expresión de mi cara. Alegría. Esa es la palabra que me viene a la mente.
Observando más detenidamente reconozco que parezco bastante infantil, pero me da igual porque me doy cuenta de lo guapa que estoy cuando de verdad soy feliz.
Miro mis ojos bien abiertos que miraban un poco a la derecha, temerosos de que no se realizara bien la foto. Grandes ojeras fruto de la semana de exámenes, trabajos y problemas personales habitan debajo de éstos. Pero esta vez, podría decir que si las veo es, sobre todo, porque soy yo y sé que las tenía. El Sol iluminaba esa fotografía y un coche negro se paraba detrás pareciendo casi hasta importante aunque en realidad, tan solo pasaba por allí.Descanso un instante y bajo un poco la mirada. Ahí está la boca. Curvada hacia arriba y formando la verdadera expresión de mi cara. Alegría. Esa es la palabra que me viene a la mente.
Observando más detenidamente reconozco que parezco bastante infantil, pero me da igual porque me doy cuenta de lo guapa que estoy cuando de verdad soy feliz.
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